Los zapatos también son dignos de caer en la customización, sobretodo los que ya no nos ponemos porque se utilizaron para un día en concreto, como en cualquier celebración que hubiésemos tenido, pero pueden ser los que acabamos de comprar y tan solo queremos darle un toque personal.
Da igual si son de tacón, con cuñas o planos, para mí lo más importante es que sean de un color uniforme a ser posible y que no lleven ninguna decoración o si la llevan que sean fácilmente eliminadas del zapato.
En un lateral, en la parte delantera, incluso en el tacón, donde creas que mejor va a quedar. Se lo puedes coser, pegar, eso dependerá del tipo de material, aunque muchos optan por el pegamento, o si no te atreves a hacerlo tú misma, te sugiero que te acerques a tu zapatero de confianza y que te oriente, ya que él también te puede dar ideas interesantes. No creo que te cueste mucho dinero.
A mi parecer, los mejores adornos que puedes aplicar al zapato son los que se hagan a ganchillo o pintarlos directamente. Yo puse un día en unos, unas flores de ganchillo a las que le coloqué una perlita en medio. Hacer alguna figurita a base de fieltro y luego pegarla, también resultará bastante ocurrente.
Incluso les podrás poner alguna manualidad hecha a base de cápsulas nespresso, que ya os hablaré sobre esto largo y tendido, porque es un mundo aparte.
Imagen por Cieleke